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Last sunset in Richmond, CA / Ultimo atardecer en Richmond, CA |
Since
we had no fixed day to go, all goodbyes happened during the past month. We were
going to leave without further ado, but my dear friend Libby had other plans
for us. She had planned with Becky and Marie to come to the marina. They brought
sidra & croissants and made a wonderful video of our casting off. Nasaria
was there as well… That the last hug was very special. A million thanks girls.
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Libby I have no words to thank you for the video. I'll miss you so much! |
The
departure to the Pacific is famous for being very hard, so we plan to arrive at
the exact moment and grab favorable conditions to leave the Gate. We had to be
out of Richmond at 10:30 am. Sadly punctuality is not one of my strongest traits,
so we set sail about half an hour later but we did arrive in time to catch the
slack under the Golden Gate.
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Approaching the Golden Gate / Acercandonos al Golden Gate |
It
was important that our first experience in the ocean was a positive one. We
wanted to make long sail legs, but we first we needed to see how Dax and I
would react in open sea for a few days. Going to New Port Beach started to look
like a very ambitious plan and we decided to shorten the first leg to Morro
Bay.
We
sailed for many hours on a beam reach and a sunny day. If it were not for the
skipper constantly giving me orders, there would be photos of me sunbathing
with a cocktail in hand like in the movies. The sunset was to die for and by
night fall our spirits were very high.
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Skipper and First Mate enjoying the ride / El Skipper y el Primer Oficial disfrutando la travesia |
I
was steering when suddenly Ricardo asked me; "Why aren’t we move?" I
had just logged 14 knots of wind and 8 knots of speed, his question did not
make any sense. I look at the wake behind the boat, and confirmed he was right.
We stopped in the middle of the ocean! A crab trap had tangled in the rudder
blade and was acting like a gigantic anchor. What follows is not for a cardiac
people. Imagine, Ricardo hanging from the stern, a moonless night, trying to
untangle the crab trap. I almost had a heart attack!!!! In the end he managed
to cut the rope and Scarlett started sailing but slower than before, which
indicated that we were still dragging something. Meanwhile we put Gastón (the
autopilot) to work to keep the course, so we needed to recharge the batteries.
The problem was that we did not know if we had anything tangled to the
propeller. Very carefully we tested the engine and turned it on. Once the drama
was over, we took some time to calm down and to enjoy a sky full of stars and
an endless ocean that surrounded the boat with fluorescent lights, due to the amassing
sea tinkles. Never in my life had I seen anything like it!
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My first dusk at sea / My primer anochecer en alta mar |
Dawn
found us in Big Sur. We were without sleep, exhausted and worried. To make
things worse there was no wind, not even to blow a candle. It was clear we needed
to retrace our steps and stay in Monterey. We wanted to get there as early as
possible, so we decided not to wait for the wind to pick up and motor our way
back. A turn of the key ... nothing, another turn and nothing. Unbelievable but
the starting battery was more dead than a pharaon, and we could not start the
engine. We had to rig and connect the "house batteries" to the
engine and we started towards Monterey.
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Dawn with Big Sur in sight / Amanecer con Big Sur a la vista |
Foto: Ultimo atardecer en Richmond, CA
Como
no teníamos día fijo para irnos todas las despedidas sucedieron durante el último mes. Nos íbamos a ir sin más ni más, pero mi
querida amiga Libby tenía otros planes para nosotros. Ella había
coordinado con Becky y Marie para venir a la marina. Trajeron Sidra & croissants
e hicieron este video. Nasaria tambien
vino… Ese último abrazo fue muy especial. Un millón de gracias chicas.
Foto: Libby no tengo palabras para agradecerte el video. Te voy a extranar mucho!
La
salida al Pacífico es famosa por ser muy dura, por lo que planeamos para llegar
en el moment exacto y agarrar condiciones favorables para salir del Gate. Teníamos que estar fuera de Richmond a las
10:30 am. Lamentablemente la puntualidad no es una de mis características mas fuertes,
por lo que zarpamos como media hora mas tarde pero igual llegamos a tiempo para
agarrar el ‘slack’ debajo del Golden Gate.
Foto: Acercandonos al Golden Gate
Era
importante que nuestra primer experiencia en el océano fuese positiva. Al principio queríamos hacer tramos largos
pero primero teníamos que ver como nos iba a Dax y a mi en el mar abierto por
unos días. Ir a New Port Beach de
entrada empezó a parecernos un plan muy ambicioso y decidimos acortar el primer
tramo a Morro Bay.
Navegamos
por muchas horas con el viento de través y un día de sol radiante. Si no fuera porque el skipper me tenía
trabajando constantemente, habrían fotos mías tomando sol con un cocktail en
mano como en las películas. El atardecer fue de morir y cuando se hizo noche estabamos
todos de muy buen ánimo.
Foto: El Skipper y el Primer Oficial disfrutando la travesia
Yo
estaba timoneando cuando de repente Ricardo me pregunta; “Porqué no nos movemos?” Acababa de log 14 nudos de viento y 8 nudos
de velocidad, la pregunta no tenía sentido. Miro la estela detrás del barco, y confirmo que
tiene razón. Estabamos parados en el
medio del océano! Una trampa de cangrejos se nos había enredado en la pala del
timón. Lo que sigue no es para cardíacos. Imaginen a Ricardo colgado de la popa,
una noche sin luna, tratando de desenredar la trampa de cangrejos. Casi me viene algo!!!! Al final logró cortar la cuerda y Scarlett
salió navegando lentamente, lo que indicaba que seguiamos arrastrando algo. A
todo esto habíamos puesto a Gastón (el piloto automático) a trabajar
para mantener el rumbo, por lo que necesitabamos recargar las baterías. El problema era que no sabíamos si teníamos
algo enredado en la hélice. Con mucha
cautela testeamos el motor y pudimos prenderlo.
Cuando todo termino, aprovechamos para calmarnos y de disfrutar de un
cielo con millones de estrellas y un océano interminable que rodeaba el barco
de luces fluorecentes, cortecía de las noctilucas. Nunca en mi vida había visto
nada igual!
Foto: My primer anochecer en alta mar
El
amanecer nos encontró en Big Sur. Estábamos
sin dormir, agotados y preocupados. Para
peor, no había viento ni para soplar una velita. Estaba claro que debíamos volver atrás y
quedarnos en Monterrey. Queríamos llegar
lo más temprano posible, por lo que decidimos no esperar que se levantara el
viento y prender el motor. Una vuelta a la llave… nada, otra vuelta y nada. De no creer pero la batería del motor estaba
más muerta que un faraón y no podíamos arrancar. Tuvimos
que inventar un cable para conectar las “baterías de la casa” al arranque del
motor y arrancamos rumbo a Monterey.
Foto: Amanecer con Big Sur a la vista
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Our Goodbye Party with the DVC Clan
Thank you Courtney for the pictures they are great! |
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After our goodbye party at Salute in the Richmond Marina
My dear friends from DVC... love you guys... Ed you are missing in this picture. |